lunes, octubre 30, 2006

Sigo en la jaula, sigo como un animal resignado al encierro a sabiendas de lo poco que le queda por hacer.
Hace 10 horas que estoy aquí, sentada frente a una máquina que se ha convertido en mi ventana a un mundo del que formo parte tan sólo las 3 horas que paso entre la calle y transporte público.
Desde mi ventana en dos días he estado en París con una torre de babel, en China, en Suiza, en India, en LA.
Sigo en mi jaula y aunque el vacío me causa vértigo, no logro decidirme a caer, por el momento dejo la puertecilla cerrada, para que me siga ignorando el aire y la altura, si todo cae terminaré estrellada un día de estos.
La jaula no está tan mal, a veces es cómoda, a veces ni siquiera me importa.
La conciencia de mi soledad y de mi mundo jaula es casi total.
Por ahora no me molesta tanto, me sirve por el momento, pasan muchas cosas al rededor que no deseo dejar entrar a mi jaula, prefiero seguir en ella sólo con mi indiferencia propia.

3 Comments:

Blogger cirrus said...

Todo lo que escribes se me hace tan similar, a veces el estar "guardado" como yo lo llamó, da muchas sensaciones, en ocasiones puede ser tan seguro, tan reconfortante o fastidioso, llegan sensaciones de hastío por ser todo y nada a la vez.
En un día, desconecté todos mis relojes y me aleje de cualquier cosa que me diera una noción del tiempo que pasaba y la sensación de estar guardado cambia mucho, al estar encerrado, ¿qué es el tiempo?

1:47 a.m.  
Anonymous Anónimo said...

No entiendo tus alegorías. ¿La ventana es tu compu con Internet? ¿La jaula es tu cuarto? ¿o es la jaula que se muestra a cuatro fotos de distancia?
Veo contradiccion entre la conciencia de tu soledad y los muchos amigos que aparecen en las fotos. O tal vez eres misántropa y no lo has descubierto.
La misantropía no tiene nada de malo. Yo la profeso.

8:15 p.m.  
Blogger NEcia said...

no soy misántropa, esto es sólo una etapa de mi vida en la que no me siento tan bien.

12:58 p.m.  

Publicar un comentario

<< Home